El gobierno de Irán anunció que ha dado el quinto y último paso para reducir sus compromisos operativos establecidos en el Plan de Acción Conjunta 2015 (JCPOA), que limitó el número de centrifugadoras utilizadas para el enriquecimiento de uranio.
Esto significa que el programa nuclear iraní ya no enfrenta restricciones operativas, incluida su capacidad de enriquecimiento de uranio y su cantidad, así como en investigación y desarrollo, dijo un comunicado del gobierno.
De ahora en adelante, el programa nuclear de Irán se desarrollará solo en función de sus necesidades técnicas, según el documento citado por la agencia de noticias iraní Mehr.
Se aclaró que continuará la cooperación con la Autoridad Internacional de Energía Nuclear (OIEA), cuyos inspectores fueron responsables de supervisar el cumplimiento del JCPOA, acordado en 2015.
También se especificó que si se levantan las sanciones establecidas por los Estados Unidos y Irán se beneficia, volverá a sus compromisos.
Sin abandonar JCPOA, Irán prácticamente rompió con sus compromisos acordados en el documento negociado con los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad (China, Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Rusia) más Alemania.
En 2018, Estados Unidos salió de ese acuerdo, alegando la violación iraní del acuerdo, a pesar de las evaluaciones positivas de los inspectores del OIEA, y forzar a Teherán a renegociarlo impuso varias sanciones vigentes hasta la fecha.
A partir de esa situación, Irán comenzó a revertir sus compromisos, como primer paso aumentó sus existencias de uranio enriquecido más allá de los 300 kilogramos acordados en el JCPOA.
Luego, el enriquecimiento de uranio se reinició en porcentajes superiores al 3,76 por ciento, acordado en ese documento.
En tercer lugar, Irán reanudó la operación de centrifugadoras avanzadas para expandir las reservas de uranio enriquecido, además de lanzar 20 equipos de centrifugación IR-4 y otros 20 IR-6 con fines de investigación y desarrollo.
El cuarto paso ocurrió en noviembre pasado, cuando inyectó gas nuevamente en las centrífugas de la planta de Fordow.
La declaración reitera que estas medidas se revertirán tan pronto como la Unión Europea (UE) encuentre formas prácticas de proteger el comercio mutuo de las sanciones estadounidenses.
Este mismo domingo, la UE informó que, en una llamada telefónica de su Alto Representante para la Política Exterior, Josep Borrell, el canciller iraní Mohammad Javad Zarif, le había pedido que se mantuviera dentro del acuerdo de 2015.
La decisión anunciada el domingo tiene un precedente inmediato de la operación estadounidense en el aeropuerto de Bagdad que mató al segundo poder real de Irán, el general Qasem Soleimani el viernes pasado.
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