El Ejército israelí afirmó este domingo haber encontrado «cientos» de supuestos documentos y materiales del grupo islamista Hamás con instrucciones para el ataque del pasado 7 de octubre contra territorio israelí, que dejó más de 1.400 muertos, la gran mayoría de ellos civiles.
El comunicado militar explica que se ha encontrado el manual de operaciones, así como teléfonos encriptados, equipos de telecomunicaciones y documentos con información de espionaje que fueron distribuidos entre militantes de Hamás.
Entre ese material había “órdenes detalladas” de atacar comunidades israelíes cercanas a la Franja de Gaza, junto con panfletos.
El manual describe acciones coordinadas, las fases del ataque del sábado y palabras clave, y hay una sección dedicada al secuestro de civiles en lugares cercanos a la Franja de Gaza, dijo el ejército israelí.
Paralelamente, el ejército israelí supuestamente encontró junto al cuerpo de un miembro de Hamás en suelo israelí un plan detallado para llevar a cabo el asalto contra el kibutz Alumim.
El Ejército explicó que desde el pasado sábado soldados reservistas de la unidad 8200 formaron un grupo de trabajo para investigar, analizar y examinar una serie de objetos que han recogido de los cuerpos de miembros de Hamás.
Este material ha sido analizado por la Dirección de Inteligencia y la Unidad de Combate de Ingeniería Yahalom.
Paralelamente, el Gobierno de Israel distribuye a los medios de comunicación una fotografía con un papel en árabe, que aparentemente indica el plan de ataque de la célula de Hamás que logró infiltrarse en el kibutz de Alumim.
En ese documento está escrito que el objetivo era “causar el mayor daño posible” y capturar rehenes y al grupo infiltrado se le dieron instrucciones de reunirse en el centro del kibutz, concentrar a los rehenes en un solo lugar y atacar a las fuerzas de defensa que había estado allí. en el perímetro.
Alumim fue una de las comunidades israelíes cercanas a Gaza en las que los islamistas lograron infiltrarse durante el ataque sorpresa del pasado 7 de octubre, que ha provocado una escalada de hostilidades que en una semana ha causado más víctimas que los dos meses de guerra de 2014.
Los bombardeos de represalia del ejército israelí han dejado 2.670 muertos y 9.600 heridos en Gaza, mientras que en Cisjordania, 56 palestinos han muerto por disparos de las fuerzas de seguridad israelíes y colonos ultrasionistas y 1.200 han resultado heridos.